Canal Beagle – Isla de los Estados
Ushuaia – bahía Cambaceres
Ushuaia, día nublado, sin viento, temperatura agradable. Estamos en la marina por embarcarnos en el velero “OCEAN TRAMP” que días atrás había concluido su temporada antártica. Nos reciben sus dueños, Federico y Laura. Nos acomodamos con mi esposa en el camarote asignado y empezamos a conocer nuestros compañeros de viajes, Aninda de indonesia, Katherine de Texas, Martin de Buenos Aires que se embarca para cumplir una misión científica, ya que dirige el laboratorio de artrópodos del museo Bernandino Rivadavia. Más tarde llega Miguel el cocinero de a bordo y se completa la tripulación con la llegada de Fernando un experimentado navegante a vela de Buenos Aires. Se hacen los papeles de despacho en prefectura, se terminan de cargar las últimas vituallas y ya está todo listo para zarpar. Destino final la enigmática y misteriosa ISLA DE LOS ESTADOS. A pesar de tener bastantes millas navegadas, estoy nervioso, ansioso, expectante. Todo eso me genera esta expedición a la ISLA DEL FIN DEL MUNDO. Se me viene a la mente la novela de Julio Verne, las reuniones con mis compañeros de facultad tratando de armar un cruce en kayak del estrecho de Le Maire. Ahora estoy a punto de realizar la travesía soñada y conocer esta isla tan especial.
Así comienza una placida navegación por el no menos famoso canal BEAGLE, nuestro objetivo es bahía Cambaceres donde fondearemos y pasaremos la noche. A las pocas millas de Ushuaia ya tenemos el primer punto relevante, el faro Les Éclaireurs, rodeado de miles de cormoranes que se destacan entre gaviotas, gaviotines y otras aves marinas.
Llegando a la isla Martillo hacen su aparición las ballenas Minke, navegamos entre ellas y después nos dirigimos a la isla donde nos espera una colonia de pingüinos de Magallanes y Gentoo.
Cayendo la tarde llegamos a Bahia Cambaceres, fondeamos y con el bote neumático desembarcamos para hacer nuestra primera caminata. De regreso al barco, aparece un velero en el horizonte que termina fondeando cerca nuestro. Nos acercamos con el bote a saludar, el barco se llama Amarrante, su capitán un francés y su tripulación 4 mujeres argentinas, de cerca notamos que el barco no está en buen estado, el capitán nos cuenta que vienen de Isla de los estados y que navegando por el sur de la isla los sorprendió una fuerte tormenta, que rompió la vela mayor, la chubasquera entre otras cosas más, la habían pasado muy mal, pero lograron aguantar y se recuperaron en puerto Parry, ahora ya estaban volviendo a Ushuaia. Ya en el OCEAN TRAMP con una animada cena concluye este primer día de navegación.
Bahía Cambaceres – Puerto Español
Muy temprano levamos anclas y nos dirigimos a otro lugar muy especial, con mucha historia, Puerto Español, ya en la mítica península Mitre. Después de unas horas de navegación dejamos las protegidas aguas del canal BEAGLE y la marejada se comienza a sentir, sigue nublado y con poco viento, nos acompañan más ballenas y delfines. Pasado el mediodía ingresamos en Bahia Aguirre.
Nuestra primera parada es en una playa del extremo oeste de la bahía, donde supo existir una estación de prefectura, quedando los restos de las construcciones, demostración cabal de que en península Mitre la naturaleza se impone sobre el hombre.
Recorremos la playa para visitar otro punto histórico, una cueva existente entre Punta Jalón y Punta Pique donde murió de hambre el misionero anglicano Allen Francis Gardiner junto a sus compañeros apostólicos, producto del hostigamiento por parte de los indios yaganes.
Pero el lugar nos depara otra increíble sorpresa, a unos cientos de metros, entre unas rocas de la playa emerge una forma piramidal, es uno de los ocho vértices del ALMA DEL MUNDO, proyecto creado y dirigido por Rafael Trénor formado por dos elementos fundamentales: la Esfera de la Tierra y un Cubo inmenso supuestamente inscrito en su interior, cuya diagonal — quivalente al diámetro del planeta– medirá 12.756 kilómetros. Este cubo genera los 8 vértices o esquinas del mundo. Nosotros estamos ante una de ellas, con un marco natural simplemente espectacular.
También encontramos resto del varamiento sufrido por un velerista Belga, que logró recuperarse y a duras penas llegar a Ushuaia. Otro día intenso, una rica lasagna preparada por Miguel nos espera para la cena.
Puerto Español – (Isla de los Estados) Bahía Franklin – Bahía Belgrano
Amanece nublado. Hay una cierta excitación a bordo, el OCEAN TRAMP pone rumbo a la ISLA DE LOS ESTADOS, las condiciones son buenas, hay una marejada un poco molesta pero no hay viento y el cruce del temible estrecho de Le Maire se produce con cierta tranquilidad, nuestro destino es bahía Franklin en el extremo sur oriental de la isla.
El acercamiento a la isla es emocionante, un grupo de pingüinos nadando nos dan la bienvenida a la bahía. Allí nos esperan los últimos pingüinos penacho amarrillo, la colonia es temporal y la gran mayoría ya partió. Fondeamos para almorzar y poder disfrutar de los primeros desembarcos. Las vistas son espectaculares por su vegetación, humedad, nubosidad, todo genera un ambiente misterioso.
Disfrutamos a los pingüinos, mientras los jotes y los caranchos australes también despliegan su habilidad en el aire. Lamentablemente observamos varios ciervos colorados, animal exótico introducido por el hombre, que rompe el ambiente prístino de la isla.
Nuevamente navegando rodeamos el extremo oriental y nos dirigimos a Bahía Belgrano al norte de la isla. Atardecer lluvioso y fondeo para pasar la noche.
Bahía Belgrano – Bahía Flinder – Caleta Baind – Puerto Hoppner
Los característicos cambios climáticos se hacen ver, a la madrugada la dirección de la marejada cambia radicalmente al noroeste y con mayor intensidad, el OCEAN TRAMP deja de estar protegido y se mueve violentamente, al amanecer nos movemos a caleta Baind, dentro de la bahía Flinder y volvemos a estar en aguas reparadas y tranquilas.
El día es lluvioso y aprovechamos para escuchar en el cómodo living del OCEAN TRAMP al Dr. Martin Ramirez, el científico a bordo, que nos cuenta sobre su especialidad, las arañas. Nos comenta entusiasmado que en la isla encontraron una nueva especie, a la que están estudiando más en profundidad, y que todavía no fue renombrada. Una muy didáctica e instructiva charla.
Sigue lloviendo pero igualmente desembarcamos para conocer un poco la zona.
En navegación nos cruzamos con delfines australes que nos deleitan con sus saltos y nos acompañan durante un rato. Con llovizna y muy nublado entramos al mítico puerto Hoppner, a pesar de las condiciones adversas, el lugar es increíble, entramos a la primera bahía y luego a través de un pasaje que dejaba un metro a cada lado del barco, ingresamos a la segunda bahía con una hábil maniobra por parte del capitán, Federico.
Ahora si estamos absolutamente protegidos de todo y rodeados de montañas verdes, aquí recalamos para pasar la noche y recorrer la zona al día siguiente.
Amanecer espectacular. El sol baña las montañas verdes, una gran cascada se destaca entre las laderas, y el cielo azul le dan marco a un escenario increíble.
Desembarcamos ansiosos, con la intención de poder subir un poco las laderas. Mientras Martin muy concentrado muestra su habilidad para atrapar las pequeñas arañas.
Comenzamos a subir, en un terreno difícil, es turba con mucha agua. Así vamos pasando entre los guindos, ñires, los espinosos calafates, mas arriba se ven también lengas.
Disfrutamos de la vista panorámica de puerto Hoppner a pleno sol. Pero a medida que pasa la mañana aparecen las nubes y ya al mediodía está bastante nublado, situaciones típicas de la isla, pasan unas horas y de nuevo el sol aparece, lo que invita a salir a navegar, un grupo sale en los kayaks, nosotros en el bote.
Una bella tarde de navegación donde disfrutamos del encuentro con los patos quetros a vapor, una simpática especie de patos que no vuela pero corre por el agua girando rápidamente sus patas que dan la sensación de ser las ruedas de los barcos a vapor.
Dejamos los botes e ingresamos caminando por el agua a un gran remanso de unos de los arroyos que descargan a la bahía, parece un pequeño lago escondido con pocos centímetros de profundidad.
Regresamos al barco para disfrutar una cálida cena.
Ultimo día en puerto Hoppner, mientras esperamos que suba la marea para poder salir de esta bahía increíble, desembarcamos para realizar una caminata del lado opuesto al que habíamos visitado el día anterior, nuevamente a lidiar con la turba y el agua que surge del suelo a cada paso, la recompensa es una vista espectacular.
Aquí pudimos apreciar más de cerca la gran cascada que se destaca entre las laderas. Regresamos al barco y con la marea ideal salimos rumbo a puerto Cook.
Después de una tranquila navegación, con una marejada de noroeste y un viento del sudoeste, llegamos a esta bahía histórica, nos amarramos a la boya que la armada argentina mantiene operativa en ese lugar. Desembarcamos rápidamente para aprovechar las últimas horas de luz. Ya en la playa observamos los restos del que fuera el presidio militar de la isla, recordemos que el primer presidio estuvo en San Juan de salvamento y después fue trasladado a este lugar.
También nos encontramos con unas diez tumbas que conforman el cementerio. Emprendemos la caminata al interior, a poca distancia está puerto Vancouver, sobre la parte sur de la isla, en este lugar los dos puertos están separados por unos cientos de metros.
Disfrutamos de un bello atardecer sobre la costa sur. Muchos huesos de ballenas se esparcen en la playa llena de algas pardas. Entre tanto Laura y Miguel se dedican a buscar una de las tantas cámaras trampas instaladas en la isla con el objetivo de registrar la presencia de la nutria de agua dulce, el escurridizo huillín, especie que se encuentra en los lagos y arroyos interiores. Con las últimas luces del día regresamos al OCEAN TRAMP.
San Juan del Salvamento – Puerto Basil Hall - Puerto Parry
Muy temprano zarpamos rumbo a San Juan del Salvamento, la carga emotiva va en aumento, nos dirigimos a conocer el mítico FARO DEL FIN DEL MUNDO. El día se presenta nublado, la navegación es tranquila, al rato nomas se comienza a divisar el faro.
Silencio absoluto a bordo, cada uno se encuentra ensimismado con sus pensamientos y sensaciones.
Desembarcamos y comenzamos la caminata, disfrutando de las vistas mientras vamos subiendo a la punta elevada del cabo San Juan, donde está ubicado el faro. Saliendo de un bosque de repente nos encontramos con el faro, el momento tan esperado ha llegado, estamos en un lugar icónico, con un marco natural único.
El sol parece querer mostrarse, recorremos el interior de este faro que fuera reconstruido en 1998, respetando el diseño original.
Recordemos que el faro original fue construido en el año 1884, para su construcción colaboraron unos presos civiles traídos desde Buenos Aires, para lo cual se establece el primer presidio, junto con una subprefectura marítima y un puesto de salvamento.
El presidio se convierte en una cárcel militar y es mudado a puerto Cook. En 1901 el faro se abandona ya que se instala el faro Año Nuevo en la isla Observatorio, islote ubicado mar adentro al norte de la isla, donde la visibilidad es muy superior. Después de casi un siglo de abandono, el navegante francés André Bronner comienza en 1995 el duro trabajo de intentar su reconstrucción, consigue los planos originales y en 1998 logra montar el nuevo faro.
Dejamos este lugar con la enorme emoción de haber cumplido un sueño inimaginable.
Ahora navegamos rumbo a puerto Basil Hall, donde Laura tiene que recoger otra de las cámaras trampas. Otro lugar increíble, donde disfrutamos una navegación en el bote, visitando una pequeña colonia de lobos marinos, nos cruzamos con ostreros, garza azulada y patos entre otras aves.
Retirada la cámara trampa, nos dirigimos a otro punto emblemático, puerto Parry, donde está el apostadero naval comandante Luis Piedrabuena. Esta bahía también es muy profunda y protegida, ya avanzada la tarde nos amarramos a la boya del destacamento y procedemos al desembarco. Nos reciben todo el personal del lugar, Alberto que es el jefe oriundo de la ciudad de Salta, el encargado de mantenimiento Diego, de Punta Lara, la enfermera Gabriela de Córdoba y por último el más joven del grupo el marinero Rodrigo.
Y está el personaje más importante, el simpático Rocky, un perrito que lleva años acompañando a los distintos grupos que cada 45 días van siendo reemplazados en el destacamento.
A la noche compartimos unas ricas pizzas en el OCEAN TRAMP con todo el grupo del destacamento. Divertida y cálida cena que sirve para estrechar vínculos con esta gente que se encuentra en lugares tan alejados y tienen la enorme responsabilidad de ejercer la soberanía nacional.
El jefe Alberto nos comenta que ya les prometieron la antena satelital para tener internet y también importantes mejoras en el destacamento, lo cual es celebrado por todos nosotros. Despedida emotiva ya que temprano partiremos comenzando el regreso al continente.
San Juan del Salvamento – Puerto Basil Hall - Puerto Parry
Muy temprano el OCEAN TRAMP comienza su derrotero de vuelta ya que hay un anuncio de temporal con más de 60 nudos de viento para los próximos días, esto hace que adelantemos nuestro regreso. Esta vez el estrecho de Le maire con vientos de hasta 35 nudos nos recuerda su fama histórica. La navegación es bastante movida, pero la marea ayuda y avanzamos a buen ritmo, que nos permite llegar a la noche a la isla de Gable, en las protegidas aguas del canal BEAGLE, donde fondeamos para pasar la noche tranquilos.
Amanecer espectacular que disfrutamos mientras navegamos entre islotes por el paso Guaraní, rumbo a Ushuaia. Y así al mediodía después de una tranquila navegación por el BEAGLE arribamos a Ushuaia, para dar por finalizado este increíble y más que emotivo viaje.
Espero que las imágenes puedan transmitir en parte la belleza natural de esta misteriosa ISLA DE LOS ESTADOS y su mítico FARO DEL FIN DEL MUNDO.